lunes, 3 de diciembre de 2007

El espíritu persiste

No fueron fiestas excepcionales por lo formal pero sí por lo anímico. Considerar los reencuentros y los escenarios exclusivamente me parece injusto porque el acontecimiento profesional del año y sus circunstancias depararon más de una sensación agradable. Fue como en los viejos tiempos, una celebración de menos a más. Como cuando cada cosa estaba en su sitio y todo transcurría con naturalidad, lejos de los quebraderos de cabeza que trae la edad. Y encima, por partida doble.
La tensión y la falta de glamour del primer aniversario, el de Valencia, quedaron compensados por el espíritu colectivo. Tuve la agradable sensación de haber regresado al colegio, cuando los profesores concertaban citas colectivas con los padres e intercambiábamos presentaciones entre los colegas. Porque quien más quien menos estuvo entre familiares y amigos. Yo mismo conocí a los padres de muchos y exhibí a mis compañeros ante el mío. Luego, todo fue como esperaba, genial. Pasándomelo como no recordaba y haciendo más de una confesión. Incluso ejerciendo de modelo de un gran maestro.
La segunda, la de Alicante, fue aún mejor. No hubo casi presentaciones pero sí más complicidad y una maestra de ceremonias insuperable (de la que nos privaron en Valencia por un 'despiste' del jefe de esos que no existen luego). La fiesta vino con los de siempre y con los nuevos. Los extraños desaparecieron pronto y nos dedicamos a lo nuestro, a pasarlo bien. Algunos aprovecharon para conocer a sus compañeros en la distancia en su mejor momento, en la relajación de una gran farra. Otros, para confirmar sus suposiciones. Sólo eché en falta una cosa: a mi amigo del alma decretando el final con una gran charla. Aunque los nuevos tiempos no son tampoco nada malos.
La tercera la propició la oportunidad y era, quizás, la que más nervioso me ponía a priori. Sin embargo, fue entrar y sentirme cómodo, tanto por ellos como por mí mismo.
Nada más que pedir a un fin de semana excepcional.

3 comentarios:

Juanjo Marcos dijo...

Ahí, ahí, siempre positivo y ni una sola lágrima hasta 2009.

alberto di lolli dijo...

Vaya, cuánto tiempo sin pasar por aquí. Parece que las actualizaciones han bajado el ritmo. Eso debe ser que el momento de duda está pasando y ya lo vas viendo todo más claro .... vamos, digo yo.

Anónimo dijo...

No, la ausencia de internete en mi hogar. Próximamente más actualizaciones...